RISOTERAPIA EN FAMILIA

IMPORTANCIA DEL JUEGO ENTRE PADRES E HIJOS

Los niños tienen la necesidad innata de jugar, a través del juego aprenden a conocer el mundo y desarrollan sus habilidades. Jugar de forma libre y espontánea les permite experimentar, desarrollar su creatividad y elaborar sus propias estrategias. Todo lo que viven y hacen por sí mismos, se fija mucho más en su memoria y es más fácil de aprender.
Pero jugar libres, no significa jugar solos. También necesitan compañeros de juegos con los que compartir sus experiencias y sus logros, y por supuesto, con los que divertirse. Los primeros compañeros de juego son sus propios padres. Para los niños en sus primeros años, la compañía y el apoyo de sus padres, es fundamental para enfrentarse a un mundo desconocido y para atreverse a hacer esa gran cantidad de descubrimientos. Cuando un bebé está cerca de sus progenitores, se siente protegido y seguro, y eso le proporciona la confianza suficiente para dedicarse plenamente a su juego y poner todos sus sentidos en lo que está haciendo. Si siente el acompañamiento de sus padres, se atreverá a probar diferentes alternativas, y probablemente obtenga más resultados.
A veces creemos que cuando el bebé crece, lo que necesita es jugar con otros niños y que ya no le resulta tan útil jugar con sus padres. Pero esto no es así.
Los niños necesitan seguir jugando con sus padres, compartir sus juegos y divertirse con ellos.

JUGAR CON LOS HIJOS

  • Fomenta la autoestima y las relaciones interfamiliares.
  • Infunde seguridad al niño y promueve sus habilidades socioafectivas.
  • Permite una mayor vivencia de las emociones.
  • Fomenta la creatividad infantil.
  • Favorece la atención del niño.
  • Potencia la comunicación y otras habilidades sociales.

Los padres que se implican en el juego de sus hijos tienen muchas más probabilidades de criar un hijo feliz.

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